No me interesa en absoluto las presentaciones grandilocuentes que Florentino realiza para vender la imagen de club poderoso y galáctico; no me interesa las desavenencias entre Etó y Laporta; ni siquiera donde recalará Villa finalmente. Me interesa un asunto más mundano y que debimos poner freno hace ya cierto tiempo.
Nuestra cantera pasa por ser de las mejores de España, prueba de ello los resultados que obtiene y su proyección incalculable hacia el exterior; pero no es óbice para que a las primeras de cambio, mercenarios de este bendito deporte, cuatreros que tan sólo les interesa el dinero, pretendan robarnos lo que mimamos y educamos, como personas y como deportistas hasta la extenuación. No es de recibo que cuando despunta un jugador, aconsejado por el cuatrero que merodea por nuestra ciudad deportiva como por su casa, un equipo pretenda llevárselo y gratis. No es de recibo, ni justo.
No sé como está la legislación, ni me ha de preocupar ello, pues quien conoce la ley y sus intríngulis es capaz de sacarle partido de mil maneras para arrimar las ascuas a su salten. De eso nuestro presidente sabe mucho y es el responsable directo de poner freno a semejante atraco.
Que si a la familia le ponen los ojos a cuadritos…, que si al niño le ofertan el futuro de su vida y la de los suyos, que… que… Argucias que utilizan para robarnos lo que con tanto esfuerzo y trabajo desarrollan a diario cuantos se encuentran en la ciudad deportiva.
De no haber forma para atajar el que el Liverpool, como antes otros, pretenda al juvenil Luis Alberto y gratis, ¿para qué sirve costear y mantener la ciudad deportiva? ¿para qué tantos quebraderos de cabeza en planificarla y prepararla para unos chavales que a las primeras de cambio nos lo van a robar?. Pero no quedan aquí las preguntas, viene ahora la más lógica y que entraña un serio compromiso de actuación: ¿Por qué no se llevan a chavales de las canteras del Villarreal, Atco. de Madrid, Sporting de Gijón, Ath. de Bilbao, Español o Valencia por poner ejemplos que están en consonancia con el nuestro?
Algo harán para que no sea posible esta circunstancia y por el contrario sólo pongan sus ojos de halcón en la que tiene el Sevilla, FC. en la carretera de Utrera.
Independientemente de la labor que se realiza en nuestra ciudad deportiva, la verdad es que en proporción son pocos los jugadores que llegan a conseguir sus propósitos y superar las múltiples adversidades para militar con continuidad en el primer equipo, pero no es óbice y sí una aberración que, de ellos, algunos nos los roben antes de tiempo y por la cara las múltiples sanguijuelas que pululan como perico por su casa en nuestras instalaciones.
Algo debe hacer de una vez por todas nuestro Consejo de Administración para que situaciones como las de Luis Alberto, si definitivamente se marcha como lo hicieron antes otros, no vuelvan a repetirse.
Fco. Borrego
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